La autora de este estudio, miembro del Departamento de Historia Medieval de la Universidad de Valladolid, analiza la rebelión irmandiña, situándola en el marco de la crisis general del feudalismo y de las transformaciones surgidas durante los siglo XIV y XV. En el reino castellano la reacción popular contra el dominio señorial se traduce en un aumento de la conflictividad, agravada por las circunstancias políticas y económicas, con diversidad de manifestaciones emanadas de una raíz común subyacente. Por su parte, Galicia aporta unos caracteres específicos, presentes durante el período medieval, que dotan a la rebelión irmandiña de un especial significado que este libro procura resaltar, sintetizando lo hasta ahora conocido y añadiendo aportaciones y concepciones originales para la comprensión de un momento decisivo de la historia de Galicia.