Maksim Gorki
Alekséi Maksimovich Peskov, conocido por su pseudónimo Maksim Gorki (1868-1936) firmó algunas de las obras más relevantes de la literatura rusa de los siglos xix y xx. Cuando tenía cinco años el cólera le arrebató a su padre, por lo que su madre y él se vieron obligados a vivir en el asfixiante hogar de la familia paterna, de donde fue expulsado a los diez u once años, tras el fallecimiento de su madre. Sus vagabundeos y la variedad de oficios que hubo de ejercer durante su adolescencia son piezas fundamentales de una experiencia vital que plasmó a la perfección en su obra literaria. Gorki fue autodidacta. En el año 1898, tenía dos volúmenes de narrativa corta que le habían granjeado popularidad. De ideales marxistas, fue un ardiente defensor de la Revolución rusa, pese a la censura que sufrieron algunas de sus obras y a haber pasado una temporada en la cárcel. Con un tono realista, fue el primer autor que escribió de modo compresivo y favorable sobre los trabajadores, los pobres y los vagabundos, enfatizando su lucha contra las circunstancias y el destino que les ha tocado vivir. La obra de Gorki es ingente y cubre desde la narrativa hasta el teatro y el ensayo: novelas como La madre (1907), obras como Los bajos fondos (1902) y libros de memorias como Mi infancia (1914), En el mundo (1916) y Mis universidades (1923). Dejó una tetralogía inacabada La vida de Klim Samgin. Murió en Moscú en 1936 en circunstancias aún no aclaradas.